Lunes 02 de agosto de 2021. Tiempo Ordinario, Año Impar, Semana No. 18º

Ntra. Sra. de los Ángeles Eusebio de Vercelli (371)

Nm 11, 4b-15: Yo no puedo con este pueblo

Salmo 80: Aclamemos a Dios, nuestra fortaleza

Mt 14, 13-21: Denles ustedes de comer

Conseguir que las personas compartan lo suyo con las que menos tienen es un verdadero milagro. La tendencia ordinaria es que otro resuelva el problema del hambre. Alrededor de 795 millones de personas en el mundo no tienen alimento necesario para llevar una vida saludable y activa. Mueren diario 8.500 niños por desnutrición, según una estimación de Unicef. Leer el Evangelio nos compromete. El pan de La Palabra nos debe llevar al pan de la mesa compartida, eso es Eucaristía. No puedo esperar a que sea otro quien tome la iniciativa. Saber que hay personas cerca de mi casa pasando hambre es motivo suficiente para no dormir. Una práctica evangélica que nos comprometa para actuar es lo que necesitamos para cambiar el rostro del mapa mundial. No necesitamos más oraciones sino acciones. Todo es relativo, menos Dios y el hambre, como dijo el gran profeta de Brasil, Mons. Casaldáliga. Pidamos a Dios para que, en cada Eucaristía, en cada padrenuestro recordemos que hay personas necesitadas de mi solidaridad.

F/ Editorial Claretiana

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *