Wilfredo Oscorima: entre la prudencia y la conveniencia política
El gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, ha lanzado un mensaje de cautela respecto a la transparencia en los procesos administrativos, señalando que las autoridades deben ser más rigurosas al otorgar autorizaciones para evitar problemas legales. Sin embargo, su discurso se torna ambiguo cuando se le pregunta sobre su relación con la presidenta Dina Boluarte.
Lejos de marcar distancia ante cualquier polémica, Oscorima no duda en alabar a la mandataria, asegurando que “es una persona muy buena” y que “apoya la gestión en todo el país”.
Sus declaraciones dejan entrever una postura más política que ética, en un contexto donde los vínculos entre autoridades regionales y el Ejecutivo han sido cuestionados por presuntos favores y financiamiento discrecional de obras.
Si bien reafirma su compromiso con la legalidad y la transparencia, sus palabras parecen más una estrategia de supervivencia política que un real esfuerzo por fortalecer la institucionalidad.
Redacción RSM

