Veamos el rostro de Jesús en quien vive en la miseria
«Intentemos ver en quienes se ven obligados a vivir en la miseria por la injusticia social el rostro de Jesús, que nos exhorta a no permanecer indiferentes, porque, como él mismo dijo: ‘Cuanto hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis’».
En su mensaje, Francisco elogia la iniciativa y asegura sus oraciones «por el buen desarrollo del encuentro y por sus frutos». Desde su primera edición en 1991, prosigue el Pontífice, «la Semana Social Brasileña se propone como un camino hacia una ‘Iglesia en salida’, comprometida en derribar los muros del descarte y de la indiferencia, acompañando a los más pobres y a los privados de derechos fundamentales en su lucha por la tierra, la vivienda y el trabajo». Además, la iniciativa «propone una nueva economía más solidaria y la revitalización de los valores democráticos que ayuden a construir una sociedad en la que exista una verdadera participación popular en los procesos de decisión de la nación».
En este sentido, el Papa dice estar agradecido por haber promovido, junto a jóvenes brasileños, la «Economía de Clara y Francisco», así como el llamamiento -que dirigió a los participantes del Encuentro Mundial de Movimientos Populares en 2014- para responder a «un deseo muy concreto, algo que todo padre, toda madre, desea para sus hijos; un deseo que debería estar al alcance de todos, pero que hoy vemos, con tristeza, cada vez más lejos de ser una realidad en la vida de la mayoría de las personas: tierra, casa y trabajo».
De ahí la esperanza de que el «Mutirão pela vida» -colectivo de representantes de la Iglesia y del pueblo sobre cuestiones de la vida-, iniciativa vinculada a l