Martes 30 de enero 2024. Cuarta Semana del Tiempo Ordinario – Año Par
Primera lectura del segundo libro de Samuel 18, 9-10. 14b. 24-25a. 31 – 19, 3
Sal 85, 1-2. 3-4. 5-6 R/. Inclina tu oído, Señor, escúchame
Marcos 5, 21-43: No temas; basta que tengas fe
San Marcos describe en el evangelio una bella página donde nos muestra la ternura y ejemplaridad con que actúa Jesús. Primero, el poder sanador de Jesús, esta vez en beneficio de aquella mujer afligida y avergonzada por una enfermedad que la convertía en impura; por eso sólo se atreve a acercarse a Jesús por detrás y a tocarlo a hurtadillas.
Los evangelios han destacado mucho el poder sanador de Jesús. Hemos de tenerlo en cuenta cuando nos acercamos a Él, especialmente en los sacramentos del Perdón y de la Eucaristía. En ambos, el Señor se pone a nuestra disposición como médico dispuesto a curar todos nuestros males.
Segundo momento. La mejor disposición para acercarse a esos sacramentos es la de aquella mujer: fe en Jesús y deseo de curación. Tu fe te ha curado. Vete en paz y con salud. El Señor quiere la salud para nosotros, en el alma y también en el cuerpo.
En tercer lugar, es importante observar Que Jesús no sólo quería curarla, sino también tener un verdadero encuentro personal con ella. ¿”Quién me ha tocado”? Quiere conocerla y entablar conversación. Que así sean nuestros encuentros con el Señor en los Sacramentos.
F/ Dominicos.org