Jueves 02 de Julio de 2020. A. 13a Semana T.0.
Proceso y Martiniano, mártires (s. I)
Am 7,10-17: Ve y profetiza. Salmo 18: Los mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente justos.Mt 9,1-8: La gente alababa a Dios
Mt 9,1-8 Jesús es el predicador de la gracia de Dios, actúa sanando a los que sufren. Ve al paralítico tendido en una camilla, como hoy nuestros enfermos paralizados por la falta de atención en su salud, o por ser pobres son discriminados, Jesús nos invita a poner nuestra atención al que sufre. Le da vida ¡Ánimo tus pecados te son perdonados! Con este gesto produce escándalo, porque la mentalidad judía como a veces, en algunos de nosotros, relacionaban la enfermedad con el pecado.
Los letrados piensan mal de Jesús: Es un blasfemo. Sólo Dios puede perdonar los pecados. Jesús les increpa su falta de fe y de misericordia ¿Qué es más fácil, decir tus pecados te son perdonados, o decir levántate y camina? (v.5).
Jesús toca una de las realidades profundas del ser humano, a veces estamos paralizados por el miedo a arriesgar en nuestra vida. Acoger a Jesús comienza con nuestra propia conversión y la conversión de las Instituciones religiosas, civiles, educativas, sociales y políticas. Nos paraliza el egoísmo, el orgullo, no querer avanzar, ni retarnos. Jesús nos muestra un camino libre y diferente, la salvación sanadora que nos hace salir de nuestras parálisis y caminar en la búsqueda de la dignidad de todo ser humano, crecer, madurar en la fe y juntos avanzar de la mano de Jesús, a una vida más comprensiva y tolerante.
Jesús ejemplo de maestro nos cuestiona y nos abre a la búsqueda de hacer realidad su proyecto de vida, amor, paz, misericordia. Tú, nosotros podemos salir de las parálisis morales y de quienes quieren adormecer las conciencias para ver la luz de Cristo.
Fr. Héctor Herrera, o.p.